Abrazó este deporte medio de casualidad, sin tener la más mínima sospecha de los que vendría luego. Hoy es un embajador del deporte uruguayo, uno de los máximos referentes de la selección nacional y un multicampeón europeo. Durante sus vacaciones en Montevideo, en las que solo piensa en la familia, los amigos y los asados, Esteban nos recibió en su apartamento de Punta Carretas.
El resultado fue un diálogo fresco y espontáneo, en el que, fiel a su estilo, el pivot pareció ignorar las cámaras por completo. Sin olvidar su paso por la NBA y sus anécdotas con Kevin Garnett y Doc Rivers, hablamos de su agotadora temporada en el basquet internacional, incluyendo el pintoresco paso por China, el título en Italia y el Sudamericano con la selección.
A punto de cumplir 33 años, el pivot se siente más jugador que a los 22, confiesa que todavía se la banca físicamente y asegura que tiene cuerda para rato con la Celeste.