La era de Marcelo Bielsa en la selección uruguaya masculina de fútbol comenzó con una goleada 4 a 1 sobre Nicaragua. Dos goles de Zalazar, Arezo, y Brian Rodríguez.
Todos los jugadores que forman parte de estas primeras dos convocatorias saben que puede ser la única chance que tengan de ser vistos por el DT rosarino, y en sintonía con esta vidriera, jugaron un partido con alta intensidad durante la mayor parte, y algunos rendimientos llamaron la atención, tales como el caso de Rodrigo Zalazar con su pegada e inteligencia para habilitar compañeros, jugando más bien libre en la zona de volante; las gambetas de Brian Rodríguez; la solvencia y equilibrio de Emiliano Martínez en la mitad de cancha. Las apiladas de Pellistri no son nuevas, pero sí fueron muy efectivas.
También fue toda una novedad la de Franco Israel en el arco celeste, quién fue pieza fundamental en la salida por el piso del equipo.
Difícil es saber si el nivel futbolístico de Nicaragua es medida para tomar decisiones contundentes de cara a las convocatorias para el inicio de las eliminatorias mundialistas que comienzan en setiembre.
El contexto que dió inicio oficial al proceso de Bielsa fue muy efervescente. Un cruce de generaciones y festejos se dieron cita en el Estadio Centenario. Diego Forlan y el «Ruso» Perez emocionando a grandes y chicos sacándose fotos y firmando autógrafos, como si lo de Sudáfrica haya pasado hace un par de semanas; el «Flaco» Raul Castro poniendo la mística murguera y tocando fibras intimas; Alan Maturro, idolo de las nuevas camadas, sacándose de a 2 o 3 fotos cada 10 segundos.
En definitiva el saldo positivo es que hay una camada de jugadores que mueven el radar de futuros seleccionables. Aunque a veces los decimos sobre otros países, en Uruguay también salen jugadores por todos lados. Y Marcelo Bielsa que, en conferencia de prensa, manifestó que fue bueno el rendimiento y que hay varias cosas para mejorar: que el rival toque menos veces la pelota, que no recibir de espaldas, mayor intensidad en la marca, etc.
Se activó el proceso de Bielsa con nuevos aires en una noche de festejo celeste.




