Desde hace 5 meses que los preparadores físicos del fútbol uruguayo vienen cumpliendo sus tareas como trabajadores en un marco regulatorio completamente distinto al que venían acostumbrados.
El cambio fue rotundo, ya que desde el 1 de enero del 2018 entró en vigencia un estatuto específico, acordado entre la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) y la Asociación de Preparadores Físicos del Uruguay (APFU).
Atrás quedaron las incertidumbres que caracterizaron la labor de los profes que se dedicaban a trabajar en el ambiente del fútbol. Esta nueva figura ha creado derechos y garantías, favoreciendo ciertas seguridades laborales.
Durante 5 años se realizaron un montón de reuniones entre la AUF y APFU, hasta que finalmente en agosto del 2017 se llegó a una versión definitiva, la cual fue aprobada por los clubes de fútbol nucleados en la AUF.
Un primer punto importante del estatuto es que los profes tienen que inscribir un contrato en la AUF para así poder empezar a trabajar. Al igual que los jugadores y técnicos, este contrato les permite hacer las reclamaciones correspondientes, atando por ejemplo el comienzo de un campeonato en caso de que se adeuden salarios.
«Imaginate que históricamente no teníamos donde ir a reclamar nuestros contratos. Teníamos que acudir a la justicia ordinaria, que es un problemón” explica Guillermo Gil, miembro de APFU.
A su vez, para poder desempeñar tareas como preparador físico, el profesional tiene que contar con el título habilitante, lo cual cambios ciertos vicios en los que caían algunos clubes, que tomaban a estudiantes de educación física para que vayan haciendo experiencia, precarizando el ambiente laboral.
En esta línea, el estatuto determina que: “sólo podrán ejercer la función de Preparador Físico en los diferentes clubes profesionales de fútbol asociado y en cualquiera de sus divisionales, las personas que al inscribirse en el Registro de Preparadores Físicos cumplan con los siguientes requisitos: a) Presentar título de Profesor o Licenciatura de Educación Física, expedido por el ISEF, la Universidad de la República u otro organismo o entidad privada habilitada por los organismos públicos competentes para expedir dicho título. b) Presentar título de Profesor o Licenciatura de Educación Física obtenido en el extranjero, y adjuntar constancia de reválida total expedida por la Universidad de la República o por los Institutos privados habilitados por los organismos públicos competentes para otorgar dicha reválida”.
Los equipos de segunda división solicitaron poder cumplir con esta reglamentación a partir del año que viene, a fin de transitar este año toda una reestructura. Al tiempo que los equipos de primera división sí están comprometidos a cumplir con lo anterior, tanto en el plantel principal como en sus divisiones formativas.
Otro de los puntos es que también queda regulado el régimen de descanso que tendrán lo preparadores físicos así como el goce de su licencia reglamentaria.
LOS TIEMPOS NO PREVISTOS
«La Udelar maneja tiempos que no son los del fútbol. La manera en que generamos un salvoconducto fue que mientras los preparadores físicos extranjeros empezarán el trámite de reconomiento del título, eso ya las habilitaría para trabajar” detalla Gil.
Una de las situaciones no previstas en la implementación del estatuto fue justamente qué iba a pasar con los extranjeros, que en este caso hay dos preparadores físicos en Peñarol (Matías Eijo y Rodolfo Ojeda, ambos argentinos), uno en Wanderers y otro en Torque (Adrián Rocamora, argentino).
Cada uno de ellos debe realizar un trámite en su país de origen, donde tienen que apostillar el título y luego comenzar las reválidas en los organismos competentes al país donde van a cumplir su función.
«El gran problema tiene que ver con los tiempos en que se dan los procesos. Por ejemplo, en el mes de enero el ISEF (Instituto Superior de Educación Física) estaba cerrado. Esto punto no lo teníamos pensado, pero es como toda cosa nueva… la primera siempre demora pero después que se aprueba el primero los demás son mucho más fáciles”.
Más allá de estas cuestiones puntuales, el estatuto de los profes está vigente, luego de muchísimos años en los que han trabajado para concretar esta vieja aspiración.
A fines del año 2017, el Presidente de la APFU, Prof. Juan Antonio Tchadkijian, planteaba, antes de la votación en la AUF, “confiamos que los representantes políticos de los clubes decidan a favor de jerarquizar el trabajo de nuestro fútbol, responsabibilizando a los agentes mejor capacitados para la función de la preparación física deportiva y comprometiendo un marco regulatorio que ayude a la realización de la misma con la tranquilidad del reconocimiento formal y profesional”.